Nació en Chipre y a su nombre, José, le añaden
los Apóstoles el de Bernabé (hijo de la consolación).
No formaba parte de los doce pero dar sus bienes a los pobres,
avalar y seguir a San Pablo, acompañarle en su labor,
curar enfermos en nombre de Jesús y con el Evangelio
de San Mateo escrito de su puño y letra, así como
su muerte, apedreado y quemado por los judíos de Salamina,
hacia el año 62, bien merece sea añadido por siglos
a ellos.
Es Patrono de Milán, que tiene
su cabeza en reliquia, de Florencia, por haber vencido a Siena
en su fiesta, el 11 de junio de 1.269 y de otros lugares. Es
también Patrono de los tejedores. Ayudas victoriosas,
lapidaciones e incluso telares, puede que dieran pié
a la Orden de Alcántara y Diócesis de Ciudad Rodrigo
a sentar como Patrono de Eljas a San Bernabé. Un pueblo
acogedor, que da cuanto tiene, alegre, vitalista, merece tal
Patrón. Fiesta el 11 de junio.